Por lo visto, Tokio es la más hermosa de las ciudades feas. Más que de una guía de viaje, se trata de un libro de aventuras. Así es como Florent Chavouet describe Tokio y su primera novela gráfica: "Tokyo Sanpo".
Por lo visto, Tokio es la más hermosa de las ciudades feas. Más que de una guía de viaje, se trata de un libro de aventuras. Así es como Florent Chavouet describe Tokio y su primera novela gráfica: "Tokyo Sanpo".
"Tokyo Sanpo" es una guía de viajes muy diferente a todas las demás. A través de sus páginas Florent Chavouet nos invita a explorar Tokio, a caminar por sus calles y a captar diferentes momentos, muchos de ellos insólitos, de esta absurda y surrealista ciudad. En estos seis meses en que he intentado comprender un poco lo que me rodeaba, no he dejado de ser, pese a todo, un turista, con esa sensación persistente de intentar asimilar todo lo que no sé, y esa manía de pegar etiquetas de frutas por todas partes, por la única razón de que no entiendo qué es lo que pone.
Durante su estancia, Florent Chavouet aprendió a ver cada rincón de la ciudad, a entender a sus gentes y a explorar cada uno de los rasgos de una cultura opuesta a la europea. El autor reconoce haber descubierto y desarrollado un nuevo estilo, muy influenciado por la cultura nipona.
Tras 6 meses en Tokio observando durante casi 24 horas al día a los japoneses y su cultura, Florent nos selecciona los que más le ha llamado la atención y que ha intentado plasmar en "Tokyo Sanpo":
Cuando te encuentras en un lugar silencioso, como una biblioteca, siempre encontrarás a un japonés aclarándose la garganta, fuertemente.
Los japoneses no te sujetan la puerta cuando vas a pasar, no es que sean groseros, es que no es parte de su cultura. Al principio es un poco sorprendente, pero por suerte en Japón hay multitud de puertas eléctricas.
Duermen en cualquier lugar, a menudo veía ejecutivos tumbados en la hierba, con las piernas estiradas y la cabeza sobre el maletín, totalmente despeinados.
Por otro lado, cuando están en grupo, están como cansados, se agazapan y discuten casi acuclillados.
A mi regreso a Francia me preguntaron si me había gustado China, a lo que respondí que, en cualquier caso, los japoneses del lugar habían sido de lo más hospitalarios.
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https://comicstores.es/libro/tokyo-sanpo_148224148224TOKYO SANPOPor lo visto, Tokio es la más hermosa de las ciudades feas. Más que de una guía de viaje, se trata de un libro de aventuras. Así es como Florent Chavouet describe Tokio y su primera novela gráfica: "Tokyo Sanpo".
"Tokyo Sanpo" es una guía de viajes muy diferente a todas las demás. A través de sus páginas Florent Chavouet nos invita a explorar Tokio, a caminar por sus calles y a captar diferentes momentos, muchos de ellos insólitos, de esta absurda y surrealista ciudad. En estos seis meses en que he intentado comprender un poco lo que me rodeaba, no he dejado de ser, pese a todo, un turista, con esa sensación persistente de intentar asimilar todo lo que no sé, y esa manía de pegar etiquetas de frutas por todas partes, por la única razón de que no entiendo qué es lo que pone.
Durante su estancia, Florent Chavouet aprendió a ver cada rincón de la ciudad, a entender a sus gentes y a explorar cada uno de los rasgos de una cultura opuesta a la europea. El autor reconoce haber descubierto y desarrollado un nuevo estilo, muy influenciado por la cultura nipona.
Tras 6 meses en Tokio observando durante casi 24 horas al día a los japoneses y su cultura, Florent nos selecciona los que más le ha llamado la atención y que ha intentado plasmar en "Tokyo Sanpo":
Cuando te encuentras en un lugar silencioso, como una biblioteca, siempre encontrarás a un japonés aclarándose la garganta, fuertemente.
Los japoneses no te sujetan la puerta cuando vas a pasar, no es que sean groseros, es que no es parte de su cultura. Al principio es un poco sorprendente, pero por suerte en Japón hay multitud de puertas eléctricas.
Duermen en cualquier lugar, a menudo veía ejecutivos tumbados en la hierba, con las piernas estiradas y la cabeza sobre el maletín, totalmente despeinados.
Por otro lado, cuando están en grupo, están como cansados, se agazapan y discuten casi acuclillados.
A mi regreso a Francia me preguntaron si me había gustado China, a lo que respondí que, en cualquier caso, los japoneses del lugar habían sido de lo más hospitalarios. https://comicstores.es/imagenes/9788415/978841553010.JPG26.6028.005.001.4OutOfStockCómicCómic/Cómic - cómic europeohttps://comicstores.es/imagenes/9788415/978841553010.JPG585870585658585195585194585166
